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Comienzo esta serie con la siguiente frase de Michael Jordan: “Tienes que esperar cosas de ti mismo antes de poder hacerlas.” Veamos su trasfondo y su aplicación práctica.
El liderazgo de Jordan: la expectativa personal
Existen grandes frases sobre el mundo de los negocios, el emprendimiento y el liderazgo.
Siempre que una persona famosa habla, hay alguien ahí para escucharle, pero poco nos detenemos a ver el trasfondo de la frase, digerir verdaderamente el aprendizaje, o pensar en su aplicación práctica.
Por ello he preparado esta serie de artículos en que comparto una o varias frases, no tan conocidas, de personas de negocios, grandes deportistas, líderes o pensadores, unas veces entrelazando varias frases que vinculan una temática específica o desmenuzando el aprendizaje de una; otras, apoyándolas, y en unas más, cuestionándolas, pues al final del día tampoco podemos creer ciegamente en lo que se nos dice.
Por ello me gustaría comenzar con esta frase:
“Tienes que esperar cosas de ti mismo antes de poder hacerlas”: Michael Jordan.
La palabra crucial de la frase: Esperar.
La idea central: La expectativa de uno mismo para su realización.
La frase de forma inversa: No puedes hacer nada que no haya habitado en el terreno de tus propias expectativas.
No puede comenzar a existir en nosotros algo que no esperamos que exista.
Esta gran frase de Michael Jordan sobre el liderazgo personal señala el comienzo de todo, pero no desde los sueños o las fantasías, sino desde el interior de nosotros mismos.
Explicación: La frase es sumamente interesante porque sólo plantea el terreno de lo real, mediante la habilitación de la posibilidad. Te voy a explicar:
Uno puede tener la expectativa de que una pera caiga de un manzano. Y puede vivir engañado toda su vida. Pero el manzano, no.
El manzano sabe, vive y siente que es un manzano, y que un día dará un fruto, y ese fruto será una manzana, porque eso le corresponde hacer, porque dentro de sí existe la posibilidad y es ésta la que lo habilita.
Entonces las expectativas sólo se dan per se, en el terreno de la posibilidad.
Nadie espera mojarse con fuego o quemarse con agua, ¿cierto? A eso me refiero.
Por lo tanto, sólo se espera y se genera la expectativa sobre lo que en nuestros parámetros es real y posible. Habilitándolo.
¿Qué es real y posible en tu mundo? ¿Qué es real y posible porque sabes que te es factible?
De ahí que lo que se espere se transforme en expectativa, pero sólo por ser habilitado en la posibilidad real. Pareciera una locura, pero es real.
Pues entonces es la posibilidad la que está habilitada en el mundo de quien lo sabe posible. No es cuestión de creencia sino de posibilidad. No es cuestión de creer sino de saber. En la creencia existe la posibilidad de duda; en la certeza no. Ahí reside la diferencia.
Reducción de la explicación: Por consecuencia, sólo puede existir la expectativa de lo que habilitamos en nosotros mismos, porque nos pertenece.
Reflexión: La pregunta es: ¿qué podemos esperar de nosotros mismos, como la mejor versión de nosotros mismos? Piénsalo y en este año que comienza haz algo para que pronto veas los frutos.
Si dentro de uno mismo se sabe que hay mucho más para dar, es nuestro interior el que nos grita las propias expectativas, a las cuales debemos hacerles caso, pues son los frutos que nos corresponden.
Es entonces que en el fondo, en lo más profundo de nosotros, notamos esa semilla, esa expectativa de nuestra posibilidad, porque el grito es uno, y porque lo otro, sencillamente, no nos es propio y ni siquiera posible.
Por eso “tienes que esperar cosas de ti mismo antes de poder hacerlas”.
Fuente: Forbes