No todo fue bueno al dejar sus trabajos y viajar por el mundo

Johannesburgo— Chanel Cartell y Stevo Dirnberger abandonaron sus trabajos en una agencia de publicidad para vivir la vida de sus sueños: viajar por todo el mundo y documentar en redes sociales su experiencia, su historia se hizo viral en febrero pasado y todo el mundo hablaba de cuan divertido sería hacerlo. Hoy, sin embargo, la pareja compartió en su blog que no todo ha sido ‘miel sobre hojuelas’.

En una publicación llamada “Por qué dejamos nuestros trabajos de publicidad para limpiar baños”, Cartell y Dirnberger, relatan la parte “fea” de haber tomado tan drástica decisión.

«Nuestro presupuesto es bastante limitado, y estamos forzados a usar nuestra creatividad para no gastar tanto en resolver algunos problemas”, escribe Cartell. “Que no los engañen las hermosas fotos de nuestro Instagram. No, no. Hasta el momento he limpiado 135 inodoros, he recogido 250 kilos de excremento de vaca, he tenido que mover más de dos toneladas de rocas, he construido 60 metros de carreteras, he tendido 57 camas y ni siquiera puedo contabilizar cuántas copas de vino he pulido”, añade.

“Verán, de haber tenido una vida lujosa en Johannesburgo… Ahora estamos en el lado opuesto. Somos limpiadores de baños, recogedores de popó de perro y vendedores en tiendas”, describe el joven.

Cartell además asegura que han comido durante varios días galletas con jamón y que en este momento no está en su mejor forma mental y psicológica. “Difícilmente dormimos cinco horas al día, cargamos nuestras maletas por varias calles hasta la madrugada para hallar en dónde dormir (porque pagar transporte no forma parte de nuestro presupuesto, obviamente)”, relata.

«Pero a pesar de que ahora tengamos muchas más canas, suciedad bajo nuestras uñas y comamos comida barata; este loco estilo de vida nos permite disfrutar de la libertad de explorar bosques suizos, infinitos golfos nórdicos, calles empedradas en Italia y ciudades cosmopolitas. Tenemos todo el tiempo para pensar en muchas ideas que nos han llevado a hacer experimentos creativos. Es como estar en el cielo”, escribió Cartell.

La pareja ahora se encuentra en Atenas y ha viajado más de 25 mil kilómetros.

Fuente: Diario